En el scrum, la lucha por la obtención del balón se traduce en un empuje que comienza desde el instante en que el balón abandona las manos del medio scrum encargado de realizar la introducción.
Por Géo TÉRMICO
El empuje debe realizarse con la espalda derecha, cabeza levantada y acompañado de un movimiento que va de abajo hacia arriba. Y al final la acción buscada es la convergencia de la masa física de cada uno en una sola fuerza, proyectándola enseguida sobre el pack adverso.
Si el jugador realiza su esfuerzo con la espalda curva, va a representar un obstáculo a la correcta cohesión de su pack. Con su mala posición va a ocasionar una pérdida de la transmisión de su esfuerzo. Además, una posición arqueada cansa enormemente el organismo y priva al jugador de una respiración natural.
El empuje tiene una repercusión positiva a condición de estar en una misma fase con la acción del medio scrum.
El tríptico introducción-empuje-hookeo debe hacerse en un solo movimiento, lo más rápido posible y de la forma más coordinada. Es la clave de la obtención de la pelota.
No perdamos de vista que lo interesante del empuje no es solamente ganar la pelota. También es un desafío físico que sirve de barómetro al equipo y es la ocasión para medirse físicamente con el pack del adversario, en una lucha de igual a igual.
Fuente: Notas de rugby