El taloneo en el scrum

El término taloneo no es verdaderamente apropiado. Se usa en España por hookeo, como melé por scrum. Ambos vocablos provienen de las voces francesas talonnage  y mêlé.

Por Géo TÉRMICO

Y en realidad el talonero (hooker) no utiliza el talón para enviar el balón detrás de él, sino más bien el interior de su pie, generalmente derecho, aunque algunos jugadores prefieren talonear con el pie izquierdo, reduciendo de esa manera al máximo la distancia recorrida por el balón sobre la línea media.

Nueve veces sobre diez, un equipo que introduce la pelota la recupera a la salida del scrum. En un comienzo, por la constitución del scrum, el talonero del equipo que introduce la pelota tiene una ventaja no despreciable sobre su homólogo adverso. Se encuentra más cerca que él de la introducción. El otro factor que favorece al equipo atacante depende de la calidad y la rapidez del encadenamiento entre la introducción y el taloneo. En su tarea, el talonero es también favorecido por el trabajo de su pilar izquierdo que goza de una posición más estable y elevada que la de los pilares derechos, lo que aumenta su campo de visión. Cuanto más el talonero tenga vista sobre la introducción de la pelota, más aumentará las posibilidades de adueñarse del balón.

Ya lo vemos, en la melé (scrum), para el talonero del equipo que defiende la probabilidad de conseguir la pelota es remota. Pero existe. Y cuando ello ocurre, perturba claramente al equipo que estaba en posesión de la pelota. Seguro de sí, este último había ubicado a sus jugadores en pos de un ataque y ahora se encuentra en posición defensiva, algo que no había contemplado. Hay ahí un claro momento de vulnerabilidad para este equipo.

Para esperar adueñarse del balón, el talonero del equipo que defiende, no puede solamente esperar una pifia del hooker del equipo que introduce, lo que ocurre muy raramente. Intentará más bien de desviar la trayectoria de la pelota. Su trabajo realizado, el relevo será tomado enseguida por el pilar derecho de su equipo que lo suplirá y cumplirá el rol de hooker.

Ocurre también que el balón sea mal hookeado, de forma demasiado débil por ejemplo, y que permanezca entonces en el scrum. Será el turno de los otros forwards en ese momento de talonear hasta que salga del scrum. Esta posibilidad es muy desagradable para el medio scrum que, a la salida, no sabe por donde el balón viene y no dispone con seguridad de una pelota conveniente que garantice un buen relanzamiento de juego.

Fuente: Notas de rugby