Con un sólido triunfo sobre Old Navy por 44 – 26, Sporting RC se mantiene a la cabeza del Torneo Apertura de la Asociación Regional de Rugby de Valparaíso (ARRV). Una victoria que deja muy bien encaminado al conjunto cuervo en el inicio de temporada, junto con confirmar el buen trabajo que se ha ido realizando al interior del club.
Si bien, fue el conjunto naval el que tuvo la oportunidad de abrir el tanteador con un penal errado por Piero Descalzi, fueron los locales los que se pusieron en ventaja a los 8 minutos de juego, gracias al try de Joaquín Jackson. Sin embargo, con un juego ofensivo ordenado y utilizando variantes en sus backs, Old Navy supo llegar al in-goal de los locales al minuto 12, con el ensayo de Germán Larraín (conversión de Tomás Covarrubias), para ponerse arriba 7 a 5.
Un golpe que sintieron fuerte los pupilos de Edmundo Reynolds, que de inmediato tomaron posesión del juego, dominando los scrums e imprimiendo velocidad tras los rucks. Fue así como fueron llegando los tries de Fernando Gándara, Matías Aguirre y Fernando Meyer, para estirar las cifras a un contundente 20 – 7. A pesar del marcador adverso, los navales lograron anotar un nuevo ensayo a escasos segundos del fin de la primera parte, a través de Luciano Moretta (conversión Covarrubias), para concluir los primeros cuarenta minutos con el marcador 20 a 14.
En la segunda parte, los cuervos no tardaron mucho en imponer sus términos. Con tries de Meyer, Ismael Soruco y Carlos Buschman, más tres conversiones de Matías Ibarra, los locales se pusieron en un inalcanzable 41 – 14. Con la victoria ya asegurada, Sporting RC decayó un poco en su intensidad, lo que permitió que los dirigidos por Ricardo Cortés apoyarán la ovalada por tercera vez en el partido, por intermedio de Camilo Ortiz de Zárate.
Ibarra se encargó se sumar por la vía del penal a favor de los dueños de casa, mientras que Larraín, ya con el tiempo expirado, consiguió el cuarto try para Old Navy (conversión Covarrubias), para establecer el definitivo 44 – 26.
Foto:Archivo O.Navy
Por: Matias Seccatore