George Nepia es un rugbier neozelandés, nacido en Wairoa el 25 de abril de 1905 y fallecido el 27 de agosto de 1986 en Ruatoria. En 100 años de historia de los All Blacks, nunca se ha conocido una estadística como la que George Nepia realizara en la gira que los Blacks hicieron en 1924-25 y que abarcó Gran Bretaña, Francia y Canadá. Ese equipo fue conocido como los “Invencibles”.
El equipo jugó 32 partidos en Europa y Canadá, ganándolos todos. El fullback de todos los encuentros fue George Nepia, con solo 19 años de edad. Esto constituye una proeza nada fácil de realizar y es por ello que Nepia llegó a ser el rostro de los “Invencibles”; tomemos en cuenta que entre sus compañeros se contaban otras leyendas, como el segundo centro Bert Cooke, el apertura Mark Nicholls y el tercera línea Maurice Brownlie.
Curiosamente, a pesar de su gira triunfal y el hecho de que era muy joven en ese momento, Nepia tuvo poca figuración en los All Blacks después de ello. Pudo haber participado en la gira en África del Sur en el año 1928, pero debido a que era maorí, de la misma forma que otro gran jugador, el medio scrum y apertura Jimmy Mill, fue considerado no seleccionable, a causa de los prejuicios raciales de los sudafricanos.
Nepia, originario de la costa rural de la Isla del Norte en Nueva Zelanda, se educó cerca de Hastings en el Colegio Agrícola Maorí, una escuela mormona donde uno de sus maestros americanos le enseño como patear un balón de volea. Fue luego descubierto por el entrenador del Hawke’s Bay en los años 1920, Norman McKenzie, integrándolo a ese equipo campeón de provincia.
Primero jugará en el puesto de apertura, moviéndose a la posición de fullback en 1924, escuchando la sugerencia de Luxford Peeti, padre de un amigo suyo y otro prodigio adolescente, Lui Paewai. De ahí tuvo una meteórica carrera desde el Bay hasta las preselecciones nacionales, para terminar en gira con los Blacks, consiguiendo con los “Invencibles” el suceso fenomenal por todos conocido.
Junto a su natural talento, Nepia tenía un físico robusto, en esa la época era grande para un tres cuarto, con 1,75 m y 82 Kg y no era más chico que muchos de los forwards en esos tiempos. Podía patear con mucha potencia, defender ferozmente, era maestro del tackle fulminante y sin ningún miedo para recuperar la pelota, de los pies de forwards a la carga.
Probablemente patear a los palos es el único sector de su juego donde no era sobresaliente. En la famosa gira de 32 partidos en 1924-25, logró 31 conversiones y cuatro penales, pero hay que considerar que era el segundo pateador después de Nicholls. En test matches, registrados, Nepia logra solo cinco puntos, una conversión y un penal, contra Australia en Sydney en 1929.
El temor con el que Nepia era esperado en Gran Bretaña, se refleja en el elocuente tributo de un importante periodista británico que escribió: “para mí no es relevante saber si Nepia es el fullback más grande de la historia. La cuestión es saber, cuál de los otros es digno de desatar los cordones de sus zapatos Cotton Oxford.”
En los últimos años, Nepia hizo sólo esporádicas apariciones con los All Blacks, fuera de jugar la serie completa en la gira a las Islas Británicas en 1930. Una de las razones fue, obviamente, ser marginado de la gira en 1928 a África del Sur. Otra razón fue el tiempo dedicado al cultivo de la tierra en la remota Costa Este. Incluso no participa en la gira de los Maoríes en 1926-27 en Gran Bretaña, no se le consideró en condiciones aptas físicamente hablando. Y en la gira de 1929 a Australia sufrió la recaída de una lesión y se vio obligado a quitar el campo de juego en el primer partido.
En 1935, ya un veterano, será llamado a preselección para la gira en las Islas Británicas. En los años de la Depresión en la década de los 30 no jugará en el alto nivel y su desgaste se hará notar. A pesar de ello, en 1935 será capitán del equipo Maorí en una gira por Australia.
Habiendo sufrido graves perjuicios financieros durante la Gran Depresión, Nepia decidirá asegurar el futuro de su familia, aceptando una oferta a mediados de los 30 para jugar Rugby a XIII en Gran Bretaña. Volverá a Nueva Zelanda en 1937, apareciendo en un XIII internacional con los Kiwis, ganando 16 a 15 contra Australia.
Después de la Segunda Guerra Mundial, Nepia volverá al rugby y en 1947 jugará dos veces con el representativo de la Costa Este y en 1950, con 40 años, jugará un partido de exhibición con el Olympians. Durante los años 50 continuará en el juego como árbitro.
A pesar de sus numerosas ausencias y frecuentes lesiones, Nepia termina su carrera con 129 partidos de primer nivel, de los cuales 46 con los All Blacks, 24 con los Maoríes y 43 en el nivel provincial con Hawke’s Bay y Costa Este.
Sus orígenes en una remota región rural, su talento como cantante (un disco en el que canta “Bajo la Luna Maorí” fue producido por el sello Decca) y el extraordinario hecho de no haber faltado en ningún partido de los “Invencibles”, siendo apenas un adolescente, le dan un cariz romántico a su carrera. Lo que hará en los años 60 y 80 serán pies de páginas agregados a la leyenda de Nepia, afirmando lo que fascinará y será motivo de superación para las generaciones futuras.
En 1963, Terry McLean escribió su biografía, “Yo, George Nepia”, uno de los mejores libros de deporte escritos en Nueva Zelanda. Y en los años 80 fue el personaje del programa de televisión “Esta es su vida” y que tuvo una enorme audiencia.
Notas de Rugby – Géo TÉRMICO